Mazatlán está creciendo y con ello su demanda de agua. Sin embargo, cada vez tenemos sequías más severas y menos agua en la presa Picachos.
De ti depende que mañana nuestras familias tengan agua limpia y suficiente.
Cuando se inauguró la presa Picachos en 2012, se pensó que el agua estaba asegurada por 50 años. Hoy, sabemos que tener una presa no garantiza tener agua. Basta ver lo que ocurrió en Monterrey en 2022, cuando sus tres presas quedaron vacías, o actualmente en ciudades como Culiacán y Los Mochis, donde el volumen de agua es tan reducido (a menos del 6% de su almacenamiento), que tuvieron que cerrar sus compuertas a la agricultura en un último esfuerzo por asegurar el consumo humano.
El cambio climático ya se siente. Sinaloa vive hoy su sequía más severa en 30 años. Se espera que, hacia 2100, la temperatura aumente hasta 4.6 °C y la lluvia disminuya un 13.4%. Esto acelerará la evaporación en presas, como Picachos, y tendremos un futuro con muy poca agua.
La campaña “Para que el agua alcance” busca movilizar a los ciudadanos de Mazatlán en torno a acciones contundentes que construyan la seguridad hídrica que necesitan nuestras familias, economía y sociedad; sobre todo ante eventos climáticos extremos.
Los sinaloenses tenemos un futuro en común y para que éste sea próspero y sustentable, necesitamos asegurar que tendremos agua suficiente. Si actuamos hoy, podemos construir ese futuro para las nuevas generaciones.
¡Sé parte del cambio!
Tu donativo se transforma en agua
Mazatlán está creciendo y con ello su demanda de agua
Mazatlán está creciendo y con ello su demanda de agua. En tan sólo 10 años, la población del puerto aumentó un 14.4% y hoy somos 501 mil 441 habitantes (Data México, 2020). Esto sin contar que además, recibimos 3.9 millones de turistas/noche al año (Sectur, 2022) que consumen hasta el triple de agua que los mazatlecos.
El turismo no es la única actividad que demanda agua de la presa Picachos. El Distrito de Riego 111 es el principal usuario del agua de la presa.
¿Cuánta agua tenemos para cubrir esta demanda?
Recordemos que la presa Picachos no produce agua, tan sólo almacena el agua del río Presidio y ahí los números oficiales son alarmantes.
Tú puedes hacer que el agua alcance
Imagina un Mazatlán con posibilidades de crecimiento, con agua suficiente para el turismo, la industria, agricultura y ciudadanía. Un Mazatlán con un futuro próspero y sustentable, con agua limpia para las nuevas generaciones.
Al apoyar la campaña “Para que el agua alcance” contribuyes a la movilización de ciudadanos en torno a acciones de conservación, restauración, y sen-sibilización que ayudan a garantizar el futuro del agua para Sinaloa. ¡Sé parte del cambio!

Sensibilizarás a los sectores productivos sobre la problemática de escasez de agua

Construirás módulos demostrativos de prácticas de manejo agropecuario sustentable

Capacitarás a productores del DR111 y jóvenes en técnicas de uso eficiente de riego
¡Sé parte del cambio!
El cambio climático amenaza la disponibilidad de agua, pues cada año llueve menos y la demanda aumenta. Por ello, a través de nuestra campaña “Para que el agua alcance” buscamos proteger zonas de importancia hidrológica, incrementar la captación de agua y educar a los sinaloenses respecto a su cuidado y uso eficiente.
Con tu donativo contribuirás a garantizar el agua para las futuras generaciones a través de actividades de monitoreo, conservación y restauración, que impactan en la calidad y cantidad de agua que recibes en tu hogar.
¡Pregunta por nuestro portafolio de donantes para RSE y descubre como tu empresa puede apoyar!
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BBVA Bancomer
Conselva, Costas y comunidades, A.C.
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NOTA: Los donativos realizados en efectivo NO son deducibles de impuestos.
Para solicitar tu recibo deducible de impuestos, envía una copia de tu comprobante de pago y tu constancia de situación fiscal al correo marisa.garcia@conselva.org.
Donativos en especie
¿Te interesa donar en especie? Si eres proveedor de algún producto o servicio que consideres puede aportar a la causa no dudes en comunicarte con nosotros a nuestro correo electrónico: comunicacion@conselva.org.
- Artículos de protección para el personal en campo (sombreros, gorras, botas de campo, chalecos, guantes especiales, etc).
- Árboles para reforestar
- Herramientas para trabajo en campo (palas, rastrillos, etc)
- Materiales de construcción
- Otros
¿Qué hemos logrado hasta ahora?
Conoce a los protectores de la cuenca
Don Lupe, de La Guásima
Guadalupe Lizárraga, mejor conocido como Don Lupe, es ya una figura célebre entre los vigilantes comunitarios del sur de Sinaloa, pues desde hace 20 años se dedica a proteger y cuidar la vegetación y fauna en los alrededores de la comunidad La Guásima, en el municipio de Concordia, Sinaloa, de donde es orgullosamente originario.
Gracias a su esfuerzo, la deforestación en esa zona ha disminuido al igual que la captura ilegal de aves, como pericos y guacamayas. Además, con el apoyo de sus compañeros vigilantes han logrado controlar incendios forestales en la zona, evitando que se propaguen.
“La vida de los vigilantes de las comunidades es muy dura, porque tienen que andar en el monte. Dormir en el monte, a la intemperie, a veces comiendo y a veces no, pero tenemos que seguir trabajando y que nos apoyen también”.
Don Lupe, vigilante comunitario de La Guásima
Comunidad de Tepuxta
En el sur de Sinaloa, en el municipio de Concordia, se encuentra Tepuxta, una comunidad ubicada cerca del río Presidio y rodeada por selva seca, o selva baja caducifolia; sin embargo, esta fuente de abundante de captación de agua, ahora se encuentra amenazada por actividades como deforestación y los efectos del cambio climático.
“Me duele lo que está pasando con mi comunidad, que todo se quieren acabar de un seco, la flora, la fauna, todo se quieren acabar. Necesitamos primero que se una el pueblo, que sea una sola voz”.Luis Felipe, comisariado de Tepuxta.
Conoce a Luis Felipe, comisariado de Tepuxta, y a Erasmo y Ángel, campesinos de la comunidad, quienes con esfuerzo participan en actividades de restauración y conservación “para que el agua alcance” para todos.
Vivero Comunitario de El Habal
Guillermina Ochoa, mejor conocida como Doña Guille, es una de las 25 mujeres que apoyan en el vivero comunitario del ejido El Habal, en el municipio de Concordia, en el sur de Sinaloa. Ellas son quienes producen los árboles que se utilizan en comunidades aledañas para labores de reforestación.
Este vivero es dirigido por Don Bernardino Ramírez, comisariado del ejido y vigilante comunitario, quien reconoce el impacto positivo que ha tenido esta actividad en la economía de la comunidad.
“Sembrar las plantitas pues me gusta venir, aparte de que ganamos. Si nos llaman a sembrar plantitas, ganamos el día”.
Doña Guille, El Habal
“Siempre los árboles les van a servir, porque van a creecer, van a dar raicecita y van a detener la tierra, como agua también ya creciendo la raíz”.
Don Bernardino, El Habal
Gracias a su trabajo, Conselva puede organizar brigadas de reforestación con dichas plantas en zonas críticas para la captación de agua en la cuenca, que también son fuente de empleo en las comunidades, “para que el agua alcance” para todos.
Organizaciones que nos respaldan
Empresas Protectoras de la cuenca






